Las ostras son muy perecederas y garantizar su frescura antes de comerlas es fundamental para prevenir enfermedades transmitidas por los alimentos. Aquí hay algunas señales de que sus ostras pueden estar echadas a perder:
Mal olor
Las ostras frescas deben tener un sabor limpio y salado. Si las ostras emiten un olor fuerte y desagradable similar al amoníaco o a huevos podridos, las ostras se han echado a perder y deben desecharse.
Abre el shell
Las ostras vivas y frescas deben tener conchas bien cerradas. Si la concha de una ostra se abre, puede significar que la ostra está muerta y ya no es segura para comer. Sin embargo, tenga en cuenta que las conchas de algunas ostras vivas pueden abrirse ligeramente, pero deben cerrarse al golpearlas.
La carcasa está dañada o agrietada
Inspeccione la carcasa en busca de grietas o daños. Si la concha de la ostra se rompe, proporciona un punto de entrada para las bacterias y la ostra debe desecharse.
Sequedad
La carne de la ostra dentro de la concha debe estar tersa, húmeda y brillante. Si la carne parece seca, arrugada o tiene una textura inusual, es posible que se haya echado a perder.
Textura viscosa
Las ostras frescas deben estar suaves al tacto, pero no demasiado pegajosas. Si la textura de las ostras es demasiado viscosa, puede indicar crecimiento bacteriano y debe evitarse.
Colores inusuales
Las ostras sanas suelen ser translúcidas o de color gris claro. Si nota algún color inusual, como amarillo, marrón o blanco cremoso, podría ser un signo de deterioro.
Olor
Las ostras frescas tienen un delicado sabor salado. Si la ostra sabe demasiado a pescado, amarga o tiene un olor desagradable, puede ser una señal de que se ha echado a perder.
Alergia o enfermedad
Comer ostras en mal estado puede provocar enfermedades transmitidas por los alimentos, especialmente si están contaminadas con bacterias dañinas. Los síntomas de enfermedades transmitidas por alimentos pueden incluir náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal y fiebre. Si experimenta alguno de estos síntomas después de comer ostras, busque atención médica.
Secretos para comer ostras de forma segura
- Compre ostras de una fuente confiable y verifique que las condiciones de almacenamiento sean adecuadas.
- Asegúrate de que la ostra esté viva golpeando la concha, ya que las ostras vivas se cerrarán.
- Deseche las ostras con conchas dañadas o abiertas.
- Refrigere las ostras a menos de 4 °C (40 °F) y cómelas lo antes posible.
- Recuerde que las ostras se disfrutan mejor frescas y si hay alguna duda sobre su calidad, es mejor pecar de cauteloso y evitar comerlas.