En los últimos años, el deterioro de la salud mental de los adolescentes se ha convertido en un problema social, y varios países están realizando investigaciones para explorar qué factores conducen al deterioro de la salud mental. Un estudio realizado por un equipo de una universidad ha descubierto que los jóvenes británicos que van a la universidad tienen más probabilidades de sufrir depresión y trastornos de ansiedad que sus pares no universitarios.
La depresión va en aumento
La depresión es una condición de salud mental caracterizada por sentimientos persistentes de tristeza, desesperanza y falta de interés en las actividades. Afecta el funcionamiento diario y puede desencadenarse por una variedad de factores, incluidos la genética y el medio ambiente. El número de adultos jóvenes con problemas de salud mental en la educación superior, como la universidad y la escuela de posgrado, ha aumentado en los últimos años, pero no está claro cómo difiere el riesgo de enfermedad mental entre jóvenes de diferentes edades.
Presión académica
En términos generales, los jóvenes con educación superior tienen más probabilidades de tener padres con mejor educación y mayores ingresos, por lo que, según investigaciones anteriores sobre el impacto del estatus socioeconómico en la salud mental, los estudiantes tienen más probabilidades de tener una salud mental estable. Se espera que así sea. Sin embargo, los estudiantes pueden experimentar un mayor estrés académico, social y financiero, lo que también puede tener un impacto negativo en su salud mental.
Datos de investigación
El equipo utilizó datos de una encuesta longitudinal de jóvenes que viven en Inglaterra para descubrir si asistir a la educación superior aumenta el riesgo de depresión y trastorno de ansiedad generalizada.
El estudio incluyó a unas 11.000 personas de entre 18 y 19 años, y los participantes de ambos grupos asistieron a cursos de educación superior, como la universidad.
Los investigadores analizaron los datos y descubrieron que los jóvenes de 18 a 19 años con educación superior tenían un riesgo ligeramente mayor de depresión y trastorno de ansiedad generalizada. Esta asociación persistió incluso después de controlar factores como el nivel socioeconómico, la educación de los padres y el historial de consumo de alcohol.
El estudio sugiere que eliminar los riesgos potenciales para la salud mental de la educación superior podría reducir las tasas de depresión y trastorno de ansiedad generalizada en un 6% entre los jóvenes de 18 a 19 años. Por otro lado, hay informes de que la diferencia en los riesgos para la salud mental entre los dos grupos desaparece después de los 25 años.